“No dejar a nadie atrás” Es el lema que las Naciones Unidas ha escogido para celebrar el Día Mundial del Agua para el 2019. De acuerdo con los diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para el 2030 el número seis es ocupado por este vital líquido, ya que tanto el agua para uso y consumo humano como para los servicios que presta en la gran diversidad de industrias en la que participa juega un papel fundamental en la reducción de la pobreza, y su adecuada gestión está directamente ligada al crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental.

En el 2010 las Naciones Unidas reconoció el acceso al agua potable y al saneamiento como un Derecho Humano, aún así, ya sea por discriminación de sexo y género, raza, etnia, religión, discapacidad, edad, estado de salud, nacionalidad, idioma, tenencia de bienes, situación económica y social, así como la degradación del medio ambiente, cambio climático, crecimiento demográfico, conflictos, flujos migratorios y desplazamientos forzosos, hoy en día se estima que 2,100 millones de personas viven sin agua potable en sus hogares, casi el 27% de la población mundial, como resultado, más de 700 niños menores de cinco años mueren diariamente de diarrea causada por agua insalubre o saneamiento deficiente.

Las metas de los ODS son ambiciosas y nada fácil de lograr, pero ya sea por pánico o por concientización, Ciudad del Cabo en Sudáfrica, logró disminuir su consumo de agua de 600 millones de litros a 507 millones de litros diarios en menos de un año, y es que recordemos que casi como en una película de ficción, se había declarado el “Día Cero” para Ciudad del Cabo para el 2025, día en el que esta ciudad dejaría de tener agua potable; al menos por ahora, existe una esperanza, aunque mínima, de cambiar el escenario.

Y aunque ese pánico o concientización no ha llegado al resto del mundo, las Naciones Unidas ambiciosamente plantean como meta de los ODS que para el 2030 se logre el acceso universal tanto al agua potable como a un saneamiento eficaz, y lograr que las aguas residuales tengan un adecuado tratamiento, pues hoy en día cerca del 80% de estas son vertidas de vuelta a los ríos o mares sin un tratamiento previo. Para tal fin, y debido a la cercanía de la fecha, se han propuesto acelerar las iniciativas encaminadas a estos objetivos y han proclamado el período 2018-2028 Decenio Internacional para la Acción “Agua para el Desarrollo Sostenible”, que comenzó el 22 de marzo de 2018 y se plantea finalice esa misma fecha en 2028.

Ante tales datos siempre queda la pregunta ¿qué puedo hacer yo? ¿Debo ser un espectador pasivo y esperar que las iniciativas gubernamentales se ejecuten correctamente?  Haz posible el cambio es la iniciativa que se ha preparado para “predicar con el ejemplo” de acuerdo a sus creadores por parte de las Naciones Unidas y han creado la “Guía de los Vagos para salvar el mundo”, donde enlistan 170 acciones para ayudar a lograr los ODS, que van desde tomar baños más cortos, reparar fugas de agua en casa hasta organizar recaudaciones de fondos en las escuelas con motivo del Día Mundial del Agua y del Día Mundial del Retrete para destinar el dinero a proyectos de ayuda, hasta el diseño de viviendas eficientes en el uso y consumo de energía y agua.

“Si te importa el futuro protagoniza el cambio, ayuda a erradicar la pobreza, reducir las desigualdades y hacer frente al cambio climático. Juntos podemos transformar el mundo”

Reza la lista de las 170 acciones para transformar nuestro mundo que se incluyen en esta guía. ¿Harás posible el cambio?

  • Fotografía de Haythem Gataa en Unsplash.