Existe la creencia arraigada en el gremio de Arquitectos e Ingenieros, así como en el ciudadano de a pie, de que intervenir patrimonio edificado está peleado con los avances tecnológicos.

Nada más lejano a la realidad. La intervención de edificios históricos de gran valor, va de la mano con las herramientas desarrolladas para otras disciplinas en específico y desde luego que, en el campo de la construcción, existen apoyos y herramientas tecnológicas para uso del restaurador o personal abocado a labores de patrimonio.

Analizamos algunos ejemplos preponderantes y de uso eficaz en este campo:

  1. Dada su importancia y gran capacidad de aportar información valiosa para fines prácticos de intervención, en primer lugar, podemos mencionar a los drones. Son estos unos elementos maravillosos, de avanzada que permiten llevar a cabo múltiples tareas que facilitan por mucho, los trabajos de registro fotográfico, por ejemplo, de predios de gran complejidad arquitectónica y de profusa ornamentación, amén de las grandes alturas y volúmenes que suelen tener las iglesias, conventos o conjuntos conventuales, acueductos, puentes, fortines, baluartes, etc. Solo por mencionar algunos de los tipos de edificios patrimoniales que se encuentran en el planeta.

Y si se piensa que el uso de los drones es reciente, habría que considerar que desde mediados del siglo XXI ya se usaban, aunque para fines bélicos. Por ejemplo, para la guerra Austrohúngara o en la de Vietnam. Esta tecnología al igual que otras como los explosivos y el GPS se originan para fines bélicos y dan el salto a campos como la edificación o ingeniería civil y arquitectura. Baste recordar el uso que hacemos hoy del sistema PERT-CPM o mejor conocido como Método de la Ruta Crítica que tuvo un desarrollo similar.

Los drones entonces son vehículos no tripulados. El hecho de poder colocarles cámaras sofisticadas nos ha llevado hoy día a poder realizar registros exhaustivos y mejorados muy superiores a los métodos tradicionales de recolección de cartografía, dado que estos demandan mucho dinero y mucho tiempo para desarrollarse.  Aquí es donde entran en juego los drones o vehículos aéreos no tripulados, pues permiten obtener productos cartográficos y modelos 3D con una rapidez y calidad insuperables.

Haciendo uso de las técnicas fotogramétricas se convierten las fotografías capturadas por el dron en información cien por ciento digital como las ortofotos, los modelos digitales de superficies y volúmenes en modelos 3D. Así se pueden registrar magistralmente bienes urbanos patrimonio de la humanidad, edificios de gran belleza, ornamentación y grandiosidad. Para su registro y uso en publicaciones especializadas, para dejar como testimonio gráfico a las generaciones que vendrán y cuando se hace uso de esta tecnología en periodos de tiempo como bimestres, trimestres, semestres o años, se pueden evaluar de una mejor manera los daños, deterioros y cambios que van sufriendo dichos bienes conforme pasa el tiempo y es posible entonces trazar estrategias y planes de acción encaminados a llevar a cabo acciones encaminadas a proteger y reducir o de plano acabar con los impactos que el inexorable tiempo hace a monumentos históricos.

  1. Una herramienta igual o más poderosa que el dron y las técnicas fotográficas, lo constituye hoy por hoy el escaneo con láser en tres dimensiones que convierte de manera genial cualquier objeto físico en un modelo digital de alta precisión, que permiten capturar de forma rápida y precisa la forma, geometría, volumetría y detalles de los numerosos objetos ornamentales que podemos encontrar en fachadas profusas e históricas.

Son enormes las ventajas y prestaciones que el uso de esta tecnología presta al restaurador o interventor de patrimonio, pues pone al alcance de la mano una fiel representación digitalizada muy completa y precisa de elementos arquitectónicos que pueden ser reproducidos y preservados a través de, por ejemplo: la ingeniería inversa. Es fascinante lo que se puede hacer una vez registrada la forma de los objetos, su reproducción o restauración se facilita de manera superlativa.

Ejemplo de esta tecnología es el sistema LiDAR, una tecnología de detección remota que consiste en sensores ubicados en drones que envían un pulso láser recopilando datos que luego se usan para reproducir modelos muy precisos (desde luego modelos 3D) y mapas de objetos y contextos arquitectónicos.

Su uso y ventajas en el campo topográfico pues ser utilizado en el registro preciso de edificaciones pues montado sobre un tripíe puede hacer un barrido de 360 grados formando una nube de puntos que luego puede ser utilizada para tener una imagen precisa de objetos y volúmenes. Suma rapidez en el proceso y liga inmediata con la tecnología BIM (Building Information Modeling) tan utilizada hoy día en el campo arquitectónico e ingenieril y desde luego en el campo del patrimonio edificado.

En esto lleva mano entonces con respecto a los métodos tradicionales, pues no son pocas las edificaciones o espacios en donde nos enfrentamos a problemas de acceso como pasos de gato en las Iglesias o pasadizos y voladizos, cúpulas, etc. donde puede verse muy comprometida la seguridad del profesional además de la dificultad para llevar a cabo mediciones precisas y donde el tiempo es también un factor de peso a considerar.

Ahora bien, esta tecnología no es nueva, ya los primeros instrumentos patentados aparecieron a finales de 1980 y en el campo de la arquitectura e ingeniería se empiezan a usar en los noventas. De esa época a la fecha actual ha tenido una increíble ganancia en velocidad, calidad y capacidad de almacenamiento de datos y velocidad en el procesamiento de los mismos, lo cual es muy favorable para nosotros.

Para poder producir un modelo de superficie o un objeto ornamental, la nube de puntos se convierte en una malla de patrones triangulares que cambian de tamaño para representar la superficie con una alta precisión considerando la enorme densidad de los puntos dentro de la nube de puntos. Dicha malla se conoce en el campo aplicable como una red irregular triangular o TIN.

  1. Un tercer ejemplo de tecnologías de vanguardia en el campo patrimonial es el Sistema FARO es una tecnología que cubre un amplio campo de aplicaciones que van desde la industria aeroespacial, automotriz, energía y recursos naturales, etc. y desde luego en la arquitectura y la ingeniería civil, es una herramienta muy importante en la preservación histórica pues permite documentar edificios de gran importancia histórica en todo el mundo.

Su funcionamiento es muy similar al anterior en cuanto a que trabaja con nubes de puntos y cuando se colocan estratégicamente varios elementos montados sobre tripíes, los resultados obtenidos son increíbles en fidelidad y calidad y se convierten en una poderosa herramienta para los profesionales que pugnan por el patrimonio.

Arquitectos, ingenieros, historiadores, arqueólogos, etc. pueden hacer uso de los resultados obtenidos para capturar, gestionar y analizar los resultados obtenidos encaminados a preservar elementos de gran Valia para la humanidad.

Foto: Resultados obtenidos con el empleo del sistema FARO en registro del Arco de Sisal, Hunucmá, Yucatán.

Fuente: archivo personal de la Arq. Laura Avilez Tax, miembro de Asociación Yucateca de Especialistas en Restauración y Conservación del Patrimonio Edificado A. C.

He aquí tan solo tres ejemplos de increíbles tecnologías y/o herramientas aplicables al campo de la restauración y conservación del patrimonio edificado, claro que no son todos ni lo serán pues los avances e investigaciones no se detienen y que bueno que es así.

He querido dejar por sentado y patentizar que en el campo de la intervención patrimonial profesionales visionarios y comprometidos, están empleando cada vez más los recursos tecnológicos para cumplir tareas tan importantes en el cuidado del patrimonio edificado, que es de todos.

Tal vez en otra ocasión platiquemos de otras tecnologías más, por ahora lo dejaremos hasta aquí y reitero un saludo a todos los interesados en la temática.

Foto: Uso de escáner laser en registro del Arco de Sisal, Hunucmá, Yucatán.

Fuente: archivo personal de  la Arq. Laura Avilez Tax, miembro de AYERAC.