Toda construcción de obra pública o privada, dentro o fuera de una mancha urbana, genera alteraciones o impactos en el entorno urbano del área o zona donde se pretenda realizar; en algunos casos pueden ser positivos y en otros negativos. Dichos impactos pueden ser en la estructura vial, hidráulica, sanitaria, social, económica, o cultural, como en los patrimonios culturales, históricos o arqueológicos, así como generar riesgos para el ser humano o su zona de influencia. Por ello se requiere identificarlos y medir la magnitud de esos impactos, definir si rebasan o no las capacidades de la infraestructura y de los servicios públicos existentes, y con esto generar un plan de acción para su mitigación.

http://contrafuerte.com.mx/648