La construcción de nuevas, mejores y modernas infraestructuras, siempre serán por demás de esperadas y deseadas por toda la sociedad, un ejercicio en el que se pueda armonizar de manera transparente, la aplicación de técnicas de vanguardia con el medio ambiente, para que trabajando de manera concertada y holística, se pueda cumplir con todos los fundamentos y encuadrarse dentro de los Objetivos del Desarrollo Sostenible, acordados por todos los países que integran la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a fin de lograr insertarse como una sociedad que respeta y construye obras que pueden ser consideradas como Sustentables.
Para ello debemos conocer, qué es lo que puede considerarse con ese calificativo pues implica al menos cuatro grandes ejes que tienen que ser debidamente integrados para poder contar con este término.
La ocupación de todo gobierno en sus tres niveles es la de brindar más y mejores ambientes a la ciudadanía, entendiéndose estos como los servicios, políticas públicas y todo lo relacionado para una mejor convivencia, procurando la preservación y racional utilización de los recursos existentes para garantizar su existencia y sustentabilidad a los que vienen detrás.
Así las cosas, debemos dar inicio exponiendo lo que se entiende y acepta como sustentabilidad o sostenibilidad para mejor comprensión, de manera general y de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU):
“Sustentabilidad es el Desarrollo que satisfaga las necesidades del presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”
El término “sustentabilidad” ha venido sufriendo diferentes transformaciones a lo largo del tiempo, hasta llegar a un concepto cada vez más moderno, pero siempre teniendo como base, el desarrollo de los sistemas sociales y ambientales para lograr una nueva disposición de los tres ejes iniciales, que conforman la cimentación del desarrollo sustentable: el económico, el social y el ambiental, al cual se ha agregado el político, como una sub-división, a manera de ser más claro en lo social.
De manera sucinta y a fin de ser prácticos, podemos considerar que para que una Infraestructura pueda calificarse como Sustentable, tiene que cumplir con estos cuatro ejes que implican, todos juntos y de manera holística su existencia, es decir, tienen que considerarse todos de manera conjunta y no puramente aislados, es prácticamente una visión de conjunto, considerando un todo integrado y sin excluir algo.
Los Ejes de la Sustentabilidad.
Vayamos por partes, para mejor comprensión, podemos considerar que la:
- Sustentabilidad Económica.
Es la utilización de diferentes estrategias para emplear, salvaguardar y mantener los recursos humanos y materiales de manera óptima, con el objetivo de crear un equilibrio responsable y provechoso, razonable a largo plazo, mediante la recuperación y el reciclaje, respetando las inversiones, su justa recuperación y rentabilidad.
- Sustentabilidad Ambiental.
Esta es la garantía de que al satisfacer nuestras necesidades de agua, alimentos, refugio, y que inclusive dedicándonos a las actividades que hacen que nuestras vidas sean placenteras, incluidas actividades de ocio y entretenimiento, no causamos daños a nuestro medio ambiente, ni agotamos los recursos que no podemos renovar y de esta forma cuidamos a las generaciones futuras, quienes aún no pueden defender lo que tendrán, y por las cuales somos responsables de brindarles las opciones para que ellos tengan una vida con las mismas o mejores oportunidades que nosotros.
- Sustentabilidad Política.
En este sentido, la política se refiere a cumplir y gestionar las normas tradicionales de salud y equidad con problemas emergentes como la participación, las necesidades, la reciprocidad, la economía, el medio ambiente, sin soslayar las nociones de felicidad, bienestar y calidad de vida, vigilando que estén consideradas dentro de un apropiado marco legal, que cumpla y cuente con las políticas públicas que garanticen su cumplimiento.
- Sustentabilidad Social.
Se refiere a cómo los individuos y las sociedades viven entre sí y se ponen de acuerdo para alcanzar objetivos de desarrollo que han elegido para sí mismos, teniendo en cuenta de los límites físicos de sus lugares y del planeta como un todo. Es la capacidad para construir y acordar las habilidades de desarrollo en las inequidades de los espacios y el medio ambiente.
Las cuatro, se analizan individualmente, solamente que tienen una condición insoslayable: todas van al mismo crisol en donde se forjan como un todo, es decir en un solo elemento, ninguna sola y ninguna sin la participación de las otras.
Conocidos someramente los términos y sus contenidos, podemos contar con los elementos mínimos de juicio, para que cuando nos “presuman” que tal o cual obra es sustentable, podamos reconocer y evaluar si el término está bien aplicado o es solamente una cuestión de mercadotecnia para impresionarnos.
¡Aguas!
Justo es decir que cualquier empresario, es libre de aventurarse en cualquier negocio, pues es él quien expone sus recursos y patrimonio para buscar una justa rentabilidad al capital y riesgo que corre, sin embargo, la obligación de la autoridad en sus tres diferentes órdenes de gobierno, siempre será la de establecer y vigilar el cumplimiento de lo que se ha descrito líneas arriba como Desarrollo Sostenible.
Para poder divulgar “oficialmente” cualquier obra, más allá del capital y sitio de la misma, sin excepción, se tiene que contar con todas las factibilidades y autorizaciones que garanticen todo lo ya reiteradamente citado.
Siendo que cualquier obra obedece a la visión de su promotor o propietario, lo que a nosotros nos pueda parecer o no su estilo, ninguna de ellas, por más colores y publicidad que tenga, puede estar por encima del análisis técnico y social que garantice el estricto cumplimiento de los cuatro ejes arriba expuestos.
Estos últimos días nos hemos venido enterando por todos los medios de comunicación y llamadas de amigos y conocidos, de la pretensión de construir un Estadio “Sostenible”, el cual ha contado con una asombrosa publicidad y difusión por todos lados, no solo de sus inversionistas sino del gobierno en mayor escala.
Lo anterior ha dejado una honda preocupación en la sociedad, por el impacto que tendría en caso de llevarse a cabo.
Menciono textualmente, “tendría”, porque es menester transparentar la factibilidad de su construcción, a través de dictámenes y estudios suficientes, que garanticen su emplazamiento y construcción, así como visibilizar a la opinión pública dichos estudios, con la puesta a disposición de éstos, para que otras organizaciones, verdaderamente autónomas y “no las mismas de siempre”, colaboren aportando seguridad y certidumbre a la sociedad.
Por ejemplo, la construcción de un estadio con las pretensiones de ser acreditado internacionalmente para deportes y espectáculos, nos lleva en primera instancia y a manera de ejemplo, a considerar lo que la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), que es la autoridad para el caso del fútbol, establece como requisito para poder tenerlo en cuenta, esto entre otras tantas consideraciones es:
- Contar con al menos con un aforo para 30,000 espacios de espectadores, mismos que son directamente proporcionales a la cantidad de espacios de estacionamiento requeridos, que, en este supuesto representan
- 10,000 cajones de estacionamiento para vehículos
- 700 cajones de estacionamiento para camiones,
- Dos salidas independientes para emergencias médicas, bomberos y policía, al menos.
- Contar con espacio suficiente para establecer círculos de control de seguridad, circundantes al estadio a fin de brindar mejor control, por lo que el espacio circundante al estadio, es mayor.
- Conexión a vialidades que ayuden a nutrir y/o desalojar el estadio de manera eficaz, conectado a vialidades apropiadas al volumen y transporte público eficiente.
- Facilidades para los aficionados para llegar caminando al estadio desde los estacionamientos.
- Accesos suficientes e independientes para aficionados por rivalidades existentes.
Lo anterior nos lleva inevitablemente a la siguiente pregunta:
¿Son 4 hectáreas suficientes para dar cabida, al menos, a estas pretensiones?
Eso es solo para el fútbol, pero recordemos lo que padecemos con el sitio de espectáculos situado en la carretera a Progreso cuando hay algún espectáculo, ¡ah! y eso que no lleva ni la mitad de los que se pretenden en el nuevo estadio.
La premisa para construir cualquier estadio es:
Debe ser diseñado para permitir el arribo, circulación y partida de miles de personas y vehículos de manera eficiente y sin inconvenientes en un breve período de tiempo, preferentemente sin afectaciones para la sociedad y el medio ambiente.
Si tenemos todo lo anterior, lo demás es lo de menos.
En pocas palabras, podemos decir, que si nos vienen a presumir cualquier infraestructura que no cumpla con lo que debe, obedece a otros motivos, menos el interés colectivo.
Corolario.
“Cualquier infraestuctura que se promocione, sin acreditarse técnica y fehacientemente, queda a deber a la transparencia y a la sociedad”
- Fotografía en portada de Vincent Botta a través de Unsplash.